Revolviendo los DVDs de mi habitación me topé con The Driver, una thriller espectacular del siempre efectivo Walter Hill, y como la tarde del domingo se presentaba tranquilota decidí pasar la siguiente hora y media la mar de entretenido.
El argumento principal nos revela a un conductor mercenario que trabaja al servicio de los atracadores que le contratan y un policía que está obsesionado con atraparlo. Está tan obsesionado, que incluso está dispuesto a infringir la ley que tanto defiende para apresarlo y encarcelarlo de por vida.
Dos curiosidades:
Ryan O'neal, su actor principal, sólo dice 350 palabras en toda la película.
Ningún personaje del filme tiene nombre propio y son citados por la ocupación que desempeñan.
http://es.youtube.com/watch?v=8ARD7Pl2LAA
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